miércoles, 8 de mayo de 2013

LESIONES MUSCULARES (Prevención y tratamiento)




Lesiones musculares más comunes


Agujetas:   son dolores punzantes que suelen surgir después del ejercicio físico severo o abusivo. Son más dolorosas a las 48 horas y responden bien a los baños de agua caliente, masajes suaves, estiramientos controlados y administración de ácido acetilsalicílico.

Contusiones: son el aplastamiento de algún tejido por compresión. Se ponen de manifiesto por dolor en la zona lesionada y un hematoma que irá cambiando paulatinamente de coloración. En los 2-3 primeros días sólo se tratará con frío local y reposo muscular, pudiendo masajear suavemente la zona a partir del 4º día.

Calambres:  son contracciones bruscas del músculo que comprimen fibras sensitivas dejando secuelas (dolores residuo), pudiendo derivar éstas en otro tipo de lesión (contractura). Los baños de agua caliente y el equilibrio hidro-electrolítico son los factores más comunes en su tratamiento.

Distensiones:  son más comúnmente conocidas como “tirones”, y se producen al rebasar la elasticidad de un músculo o de un grupo de fibras musculares. En las primeras 48-72 horas sólo se aplicará hielo y reposo, transcurridos unos días podrán realizarse maniobras suaves de masaje.

Roturas fibrilares o desgarros: los desgarros vienen producidos por varias causas...

1.     Por una tracción brusca que rompe total o parcialmente las fibras musculares
2.     Por un estiramiento excesivo
3.     Por una contracción abusiva
4.     Por una contusión con el músculo en tensión

Los primeros días aplicaremos frío y compresión con reposo, ya que en este tiempo el masaje está contraindicado. A partir de los 10-12 días siguientes a la lesión y bajo valoración de un especialista, se realizarán técnicas de masaje para la recuperación de dicha rotura.

Pautas de recuperación

En las 48-72 horas siguientes a producirse la lesión la utilización de hielo es primordial, debido a sus efectos analgésicos y anti-inflamatorios. En estos tres primeros días el reposo del músculo es muy importante, pudiendo ser de dos formas diferentes: de forma activa realizando un entreno más suave de lo habitual, o en forma de reposo total de la musculatura afectada.

Otro dato a tener en cuenta es el uso de vendajes funcionales para conseguir la optima sujeción de la zona lesionada, junto con la utilización de cremas anti-inflamatorias.

A partir del 4º-5º día se comenzará la aplicación de calor local, combinado con técnicas de masaje para la recuperación funcional del músculo.

Medidas preventivas

Merecida mención se debe a las siguientes pautas preventivas básicas:

1.     Realizar un buen calentamiento antes de la práctica deportiva

2.     Realizar una secuencia efectiva de estiramientos a la finalización de dicha práctica deportiva

3.     Ejecutar de forma correcta y controlada los movimientos y ejercicios que se desprenden de la práctica de cualquier deporte

4.     No forzar en caso de sufrir molestias o sobrecargas

5.     Acudir de forma regular al masajista o fisioterapeuta, ante todo si se es proclive a sufrir lesiones repetitivas

6.     Mantener un correcto equilibrio entre nuestro nivel físico y la actividad que vayamos a realizar

7.     Seguir una dieta equilibrada, valorando el grado de entrenamiento al que vayamos a someter a nuestro cuerpo

Estas medidas serán factores cruciales para reducir el riesgo de que se produzcan las lesiones anteriormente enunciadas.